El Parque del Arrolino es un paraje natural de mucha belleza y frescor. Está situado a unos 500 metros al sureste del pueblo. Por allí pasa el arroyuelo EL ARROLINO, que con sus aguas rápidas, limpias y cantarinas alegra este lugar. Para cruzar el riachuelo se usa un antiguo puente de piedra de tres arcos. Una gran variedad de árboles brindan su sombra a los visitantes en los calurosos días del verano.
Antíguamente este lugar se utilizaba como lavadero de Torre de Santa María, por el arroyuelo y la cercanía con el pueblo. Las mujeres frotaban la ropa en las piedras, la enjuagaban en las aguas del arroyuelo y la tendían sobre la hierba para secarla al aire libre, bajo el sol.
Hoy en día, este sitio está convertido en zona de descanso y ocio. Existe un área de juegos para los niños. Está equipado con barbacoa de piedra para preparar la comida al aire libre, mesas también de piedra y bancos. Los vecinos lo frecuentan para pasar unos momentos agradables en plena naturaleza.